Éstas son algunas de las razones para que te animes a visitar Jordania
Flota en el Mar Muerto, visita Petra, acampa bajo las estrellas con beduinos y más en tu visita a Jordania. Ve estas opciones para tu itinerario de viaje y decídete por el Reino Hachemita de Jordania para tus próximas vacaciones.
1. Flotar en un enorme lago de sal
El Mar Muerto, bordeado por Jordania, Israel y los territorios palestinos, es en realidad un lago bastante salado (alrededor de un 34 por ciento de solución salina), casi diez veces más que el agua de mar. Sus aguas azul brillante atraen nadadores que quieren la extraña sensación de flotar sin ningún esfuerzo, pues la extrema salinidad del Mar Muerto, una vez que entras en él, hace que tu cuerpo salte instantáneamente a la superficie, dejándote libre para descansar, relajarte y disfrutar de un baño en el punto más bajo del planeta.
2. Puedes ver mil cosas en una semana en cualquier época del año
¿Sólo tienes una semana de vacaciones? Es posible visitar muchos de los puntos más importantes de Jordania sin sentirse apurado. Con un tamaño parecido al estado de Indiana en los los EE.UU., el país es muy accesible, y cada región ofrece sus propias gemas.
Un itinerario posible: Vuela a Amman y pasa un día visitando sus lugares más destacados, incluyendo la Ciudadela y el antiguo palacio. Toma un día de viaje al norte para recorrer los restos de las antiguas ciudades romanas y comienza a andar su camino hacia el sur en una ruta de 5.000 años de edad (el camino del Rey) al Golfo de Aqaba, con paradas en Petra, el Mar Muerto y otros Sitios históricos como Jerash.
3. Visita Petra, una antigua metrópolis
La que fue capital del reino nabateo es una ciudad construida en piedra y es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Siglos de antigüedad se pueden ver en las tumbas y los monumentos de la metrópoli tallada profundamente en los acantilados rojizos, y no tienen igual en la Tierra. La mayoría de los visitantes a Petra sólo ven las atracciones principales (Al Khazneh o el Tesoro -el más conocido-), sin aventurarse fuera del camino principal o sin subir los 800 escalones del monumento conocido como Ad Deir (el monasterio), donde los nabateos pueden haber celebrado fiestas religiosas y su belleza vale completamente la travesía.
4. Viaja en el tiempo hasta la época del Imperio Romano
Haz lo que el antiguo Imperio Romano y los romanos hicieron; apreciar su fina arquitectura. Alrededor del siglo I d.C., Jordania estaba en el corazón de la Decápolis, una federación de más de diez ciudades romanas en el borde oriental del imperio (incluso Amman, en la época llamada Filadelfia, era parte de la Decápolis). Hoy en día, los visitantes pueden explorar restos de algunas de estas ciudades dispersas por todo el país. En la ciudad norteña de Umm Qais, puedes pasear por las filas de un anfiteatro romano increíblemente intacto, construido de roca volcánica oscura y robusta. Y eso es solo el principio.
5. Acampa bajo las estrellas con beduinos
Los beduinos, cuyo nombre árabe bedu significa habitantes del desierto, son famosos por su resistencia y hospitalidad. Estas personas semi nómadas viven en comunidades remotas, reuniendo camellos y cabras y haciendo sus hogares en tiendas. Afortunadamente, los visitantes pueden tener una idea de la vida beduina más cómodamente en Wadi Rum, un impresionante desierto en el sur de Jordania. Varios campamentos te permiten pasar unos días vagando por este desierto que los seres humanos han habitado desde tiempos prehistóricos.
6. Come como un rey
Jordania es un deleite para el amante de la comida, una de las razones es su plato nacional se llama mansaf, el cual se compone de cordero o cabra cocinada en yogur y sazonada con hierbas aromáticas y especias, luego salpicado de almendras y piñones y servido sobre una montaña de arroz. Los jordanos pasan horas haciendo mansaf, lo que requiere muchos pasos, y por lo general se disfruta con un grupo y se come con las manos.
7. Esnórquel en los arrecifes del Mar Rojo
Dirígete hacia los hermosos arrecifes y playas de Aqaba, la ciudad de Jordania en el Mar Rojo. Durante más de 2.000 años, Aqaba ha sido un puerto crucial para las rutas marítimas de Asia, África y Europa y lo sigue siendo, como atestiguan los numerosos barcos grandes del puerto. Usted puede relajarse en una playa privada, o, como recomendamos, reservar un viaje de buceo y pasar un día navegando por el Golfo de Aqaba.
¿Quieres conocer más razones para visitar Jordania? Entra en el artículo de National Geographic (en inglés) aquí: https://goo.gl/vxXeTL y entra en www.visitajordania.com para planear tu próxima aventura.